Vampiromanía!

¡Están entre nosotros!
Sí, así como lo oyen. No estoy hablando de los extraterrestres, del virus de la gripe ni de las grasas saturadas-trans. Hablo de los hijos de la noche, criaturas nocturnas y exclavos del Sol. Sí, los no muertos por excelencia: los Vampiros.
Y es que estos seres tenebrosos y bebedores de sangre ya eran populares allá por las civilizaciones egipcias, mesopotámicas y griegas, donde formaban parte del panteón demonológico de aquellas culturas. Sin  embargo, no fue hasta que el cristianismo entro en escena, cuando los vampiros cobraron protagonismo. Fue tal el furor vampírico en la Europa del Este que se extendió por el resto del continente dando más trabajo a la Santa Inquisición, y cruzando el Atlántico para mezclarse con sus propios problemas brujeriles iniciados en Salem.
Los vampiros eran obra del Maligno, fuerzas sobrenaturales cuyo corazón no latía y necesitadas de beber sangre humana por sus colmillos, alérgicos al ajo y la luz solar e incapaces de ver su reflejo en un espejo.
Poco a poco, los vampiros se han ido abriendo camino en el mundo contemporáneo, pasando de ser demonios temidos por aldeanos a grandes estrellas, adoradas por cientos o miles de adolescentes deseando que les muerdan en el cuello.
¿Hacemos un resumen?

La primera vez que los vampiros se presentaron a la sociedad mundial fue en 1922 con la película "Nosferatu: Una sinfonía de horror" donde se nos presentaba al Conde Orlok, un vampiro que descansaba en ataúd durante el día y que bebía sangre humana. Con sus ojos saltones, sus orejas puntiagudas y un aspectoc asi inhumano dista mucho de los vampiros del siglo XX1.. ¡Hay si levantara la cabeza!

Pero si hay alguien culpable de la expansión del mito de los vampiros por toda la civilización occidental, ese es Bram Stoker con su nóvela Dracula: Un relato de terror que toma como elemento histórico a Vlad el Empalador, un príncipe de Valaquia en el siglo XV cuyos métodos de tortura implicaban el empalamiento de las personas. Ha sido llevada al cine y adaptaba el múltiples ocasiones de las que rescatamos las interpretaciones de Bela Lugosi en 1931, Chistopher Lee en 1958 y Gary Oldman en 1992.

Bram Stoker es a Dracula lo que Ann Rice es a las Crónicas Vampíricas. La primera novela de la saga de esta escritoria, "Entrevista con el Vampiro" saltó a los cines en 1994 de la mano de Brad Pitt, Tom Cruise y Antonio Banderas, asentando el precedente de los vampiros guapos, musculosos e irresistibles para las damiselas del Londres victoriano.

En 1997 saltaría a las pantallas, la versión en serie juvenil de la película Buffy Cazavampiros. Buffy, se convierte en La Cazadora, dotada con habilidades sobrenaturales destinadas a acabar con la raza vampírica y demás seres de ultratumba. Etre los vampiros nos presentan al rubísimo Spike, al que le ha sido implantado un chip que le incapacita para herir a humanos y al vampiro Angelus (Angel para los amigos) que había recuperado su alma y era capaz de amar. Fue tal el éxito que Angel obtuvo su propia serie, comics sobre Buffy y toneladas de merchandising.

En 1998 directamente desde los comics Marvel, aparece la película de Blade, un híbrido entre humano y vampiro. Wesley Snipes dio vida al rol protagonista y llegó a interpretarlo hasta en dos secuelas más.

En 2003, los vampiros daban otra vuelta de tuerca al género y abandonaban los castillos tenebrosos para vivir en amplias mansiones y manejar armas supertecnológicas. Se enfrentaban a sus anáogos en el cine de terror, los hombres lobo. Kate Beckinsale tomaba el rol de Selene, una vampiresa que descrubría una conspiración para crear un híbrido entre ambas especies sobrenaturales. La película gozó de una secuela y de una precuela.

En el año 2004 surgió la película Van Helsing de Stepehn Sommers. La pelícura recupera al cazavampiros de la novela Drácula de Bram Stoker cuyo fin es eliminar a Drácula en persona (Que raro). Aparece interpretado por Richard Roxburgh que puede transformarse en una criatura peluda a camino entre murciélago y un mostruo amigo de Godzilla. Ademas le acompañan sus tres vampiresas, encarnadas por Silvia Colloca, Elena Anaya y Josie Maran. El argumento de la película gira en torno a Drácula que ha robado el invento del doctor Frankenstine con el fin de dar vida a los hijos que ha tenido con sus vampiresas. ¿A que no sabéis de quien se ayuda para deshacerse de Van Helsing? Pues sí, del Hombre lobo .

En 2007, se estrenaba la serie Blood Ties basada en las novelas de Tanya Huff. En ellas Henry Fitzroy, el vampirizado hijo ilegítimo de Enrique VIII, trabajaba como detective junto a Vicky Nelson, que abandona la policía al perder casi toda la vista en un accidente. Ambos luchaban contra vampiros y demonios.

El mismo año se estrenaba la película 30 Días de Oscuridad. La acción trancurría en un apacible pueblo de Alaska que cuenta al año con 30 días de oscuridad perpetua, algo que los vampiros han encontrado muy acogedor. Estos vampiros son extremadamente violentos y sustituyen los clásicos colmillos por una dentadura con decenas de afilados dienteciyos.

Pero el auténtico fenómeno de masas vio la luz en 2008 con la película Crepúsculo, basada en la novela del mismo nombre de Stephenie Meyer publicada en 2005. La novela trata sobre la típica chica de padres divorciados que se enamora perdidamente del vampiro Edward Cullen que vive con su familia vampírica a ojos de todo el mundo. La película rompe con la clásica imagen del vampiro, no se derriten con el sol sino que tienen piel de diamante y pueden reflejarse en los espejos. La película fue un éxito entre notables adolescentes y consiguió la adaptación cinematográfica de todas las secuelas del libro.

En el 2008 aparecía la serie True Blood, basada en las novelas de Charlaine Harris. La serie nos relata una sociedad en la que los vampiros han salido del armario y se han dado a conocer a la sociedad, debido a la fabricación de sangre artificial en botellas llamada "True Blood". En este mundo encontramos a la telépata Sookie Stackhouse que trabaja como camarera cuando concoce al nuevo inquilino del pueblo, el vampiro Bill Compton. Por supuesto, poco tardan en enamorarse y meterse en líos sobrenaturales.

En 2009 vio la luz la serie The Vampire Diaries (o Crónicas Vampíricas como mal tradujeron en España) basadas también en una serie de novelas, esta vez de L.J. Smith. La serie aborda la vida de Helena Gilbert, una chica cuyos padres acaban de morir en un accidente y que conoce a un nuevo compañero de clase, Stefan Salvatore. Nuevo, por decir algo, porque es un vampiro que nació en el pueblo hace más de cien años. Ambos se enamoran hasta que aparece en escena el hermano vampiro de Stefan, Damon, que los sumerje en un mundo lleno de vampiros, hombres lobo y brujas.

En 2009 aparecía una serie británica de nombre Being Human que en España se tradujo como "Casi Humanos". La acción gira en torno a John Mitchell, un vampiro de 117 años que he decicido dejar de beber sangre de los humanos; George Sands un chico que fue mordido por un hombre lobo y cada mes experimenta su transformación; y  Annie una mujer que fue asesinada por su prometido y que ahora como fantasma ha embrujado la casa que comparten John y George. Los tres seres sobrenaturales tratan de ser lo más humanos posibles en un mundo que ignora su existencia.

En 2011 el canal american Sy-fy se hacía con los derechos de la serie británica Being Human emitida por la BBC para hacer un remake. Así nos encontramos con Ian Daniel "Aidan" McCollin un vapiro de más de 200 años; a Joshua "Josh" Radcliff un hombre lobo bastante inexperto y temeroso de sus transformaciones, y a Sally Malik la fantamas que ha hechizado la casa donde viven. Como sus contrapartidas británicas, intentan ser humanos en la medida de lo posible, aunque el resto de seres sobrenaturales no se lo ponga fácil.

¡¡¡La fiebre vampírica no ha hecho nada más que comenzar!!!