Viajemos dos años atrás....

23 de Mayo
Fecha que muchos recordarán de por vida al dar término uno de los acontecimientos que ha quedado registrado como una de las obras maestras de la primera década de este siglo XXI.
¿Aún no sabéis de qué estoy hablando?
Retrocedamos dos años en el tiempo, coged vuestro DeLorean, vuestra cabina azul de policía o cruzad el Stargate y remontaros a las 6 de la madrugada del 23 de Mayo del 2010.
¿Qué hicistéis a esa hora?
Yo recuerdo (y creo que la mayoría de vosotros también lo haréis) haberme pegado el tremendo madrugón, meter una bolsa de palomitas en el microondas, coger una cocacola y meterme en la cama con este ágape pues...
¡Emitían el estreno mundial del último capítulo de Perdidos!

La cadena Cuatro se propuso el gran reto de emitir en versión original subtitulada el capítulo que puso fin a una serie con casi 6 años de emisión, 6 temporadas a sus espaldas y un sinfín de personajes que marcarían a toda una generación. Con tan sólo 15 minutos de retraso respecto a su emisión en yanquilandia pudimos disfrutar (con algunos errores técnicos) del culmen de una de las mejores series jamás rodada.
Y es que remontémonos al 2004 cuando el episodio piloto más caro de la historia de la televisión nos presentaba a los pasajeros del vuelo 815 de Oceanic Airlines, supervivientes de un accidente de avión y recluidos en una isla del Pacífico, a medio camino entre Sidney y Los Angeles. La serie enganchó a la audiencia desde el primer momento llenándolos de incógnitas capítulo tras capítulo y empatizando con una serie de personajes que parecían haber recibido una segunda oportunidad en sus vidas. Y semana tras semana los aficionadas elaboraban toneladas de teorías e intentaban resolver los misterios de tan peculiar isla, creando un fenómeno fan tan grande que no se veía desde que décadas atrás la gente intentara adivinar quién mató a Laura Palmer.
Y es que existen determinadas escenas que el espectador grabó en su retina. Todos nos quedamos boquiabiertos con la primera aparición del humo negro, la irrupción del oso polar, el descubrimiento de la escotilla, los famosos números 4,8,15,16,23,42 repetidos hasta la saciedad, aquel "Not Pennys boat!" o el sinfin de misterios e interrelaciones que se encondían tras las inocentes apariencias de los pasajeros.
Con el capítulo final todas las tramas entre los pasajeros quedaron resueltas muy satisfactoriamente a diferencia de otras que quedaron en el aire y dejadas a la elección de cada telespectador.

Perdidos supuso una revolución para las series de televisión cuyo éxito ninguna otra a conseguido imitar por mucho que lo hayan intentado, y su capítulo final superó en audiencia incluso al final de Friends que reunió delante de sus televisores a millones de personas.
Hoy en día oigo a mis padres y tíos hablar sobre el asesino de Laura Palmer, sobre aquel bar llamado Cheers "donde todo el mundo sabía tu nombre", sobre la lagarta (en sentido literal) Diana abriendo sus fauces y comiéndose un pobre ratón y como sinónimo de maldad siempre aparece el nombre de Ángela Channing.
Pasarán 20 años y creo que todavía recordaremos a John Locke levantándose de la silla de ruedas, a Ben Linus girando la rueda y "moviendo" la isla, el reencuentro de Sun y Jin, el beso final de Jack y Kate ,la muerte de Charlie o ese ojo de Jack cerrándose para dar carpetazo al capítulo final.
Dentro de 20 años todavía cantaremos eso de "You All Everybody..."