Tremenda fumada de película de Serie B, típico telefilm de Antena3 para un domingo por la tarde. Cualquier película es buena si en el título lleva la palabra Apocalipsis, desastre, mortal o peligroso.
Os preguntaréis como llegué a ver esta película.
La ofertaban en una web de películas online y mi aburrimiento extremo el jueves por la noche hizo el resto.
Una de las cosas que me llamó la atención fue el póster promocional (aquí a la izquierda) que mostraba el monumento de
Stonehenge, las
Pirámides de Giza y los
Moais de la Isla de Pascua semi-inundados por las aguas. Así que supuse que se trataba de una cinta contra el calentamiento global, en la que se deshelarían los polos o algo por el estilo.
¡Nada más lejos de la realidad! ¡Que agua ni que niño muerto! El único agua debió ser la que había en el vaso cuando los guionistas se tomaron un tripi.
Otro de los atractivos que me impulsó a verla fue el reparto, pues sus dos protagonistas son
Misha Collins y
Torri Higginson a quien conozco respectivamente como el ángel
Castiel de la serie
Sobrenatural y como la
Dra.Weir en
StarGate Atlantis.
¿Cómo empieza la fumada?
Con el descubrimiento de un templo egipcio en Maine, en Estados Unidos, en el que un perturbado arqueólogo inserta un jeroglífico dorado, enchufando una antigua maquinaria extraterrestre oculta dentro de los megalitos de Stonehenge. (No me extraña que Stephen King sitúe sus historias en Maine teniendo tal rico patrimonio arqueológico marciano en el subsuelo....)
¿Consecuencias?
Esta maquinaria pulveriza a los pobres turistas guiris y en menos que canta una
Banshee, el gobierno inglés envía a sus mejores científicos que no tienen ni repajolera idea de qué hacer con semejante catástrofe.
¿Quién tiene la solución?
Un téorico de la conspiración (
Misha Collins) que se dedica a retransmitir un programa de radio desde su casa, con el objetivo de informar a la población sobre la actividad extraterrestre y la existencia de robots en la Luna. Cuando intente ayudar a los militares solo una científica (
Torri Higginson) le creerá.
¿Dónde está la emoción?
Stonehenge es una máquina que ha iniciado una cuenta atrás para aniquilar la vida en la Tierra y volverla a crear desde el nivel bacteriano como hizo hace millones de años. Cada ciertas horas envía un pulso electromagnético a diferentes pirámides del mundo (Kukulkán, Keops y otra en Indonesia) que resultan ser volcanes escondidos tras las construcciones y los hace entrar en erupción. Fumadaaaaaaa
¿Cómo pretenden solucionar tal desdicha?
Con el
Mecanismo de Anticitera, un engranaje medio fosilizado de los tiempos griegos que sería la llave de la cerradura de Stonehenge para frenar el Apocalipsis. En el mundo real, existe tal artefacto y fue encontrado entre los restos de un naufragio en el Mediterráneo y tras arduos debates sobre tecnología extraterrestre, se descubrió que era parte de un artefacto griego para calcular eclipses. Pero a los guionistas les parecía mejor que fuera alienígena, mira tú por donde.
¿Y tan sencillo todo?
Por si la trama es poco ilusoria, añaden un arqueólogo majareta que quiere destruir el mundo y refugiarse junto con un grupito de jóvenes en su madurez sexual en una pirámide que ha crecido en Maine, mientras que los militares ingleses pretenden destruir el complejo de Stonehenge mediante bombas nucleares (si algo va a explotar lo mejor es hacerlo reventar mil veces peor) por lo que los dos protagonistas iniciarán su carrera contrarreloj para salvar la vida en el planeta.
Menuda fumada de película. Los guionistas oyen las palabras
Apocalipsis-Extraterrestre-Pirámide y te montan una pedazo de trama como esta. Conforme avanzaba, no sabía si reir o llorar ante las disparatadas afirmaciones de los actores y esperando a ver qué pasaba con los Moais de la Isla de Pascua del póster promocional ¡Pero no salen ni los nombran!
Menos mal que no hacen entrar en erupción el
Parque de Yellowstone... se salva porque no tiene una pirámide china de la primera disnatía que sino el Oso Yogui hubiera volado por los aires. A más de uno se le pueden atragantar las palomitas.
Puntuación: 4 sobre 10
Lo Mejor: Misha Collins. Me encanta el actor aunque el guión sea C*** de la vaca.
Lo Peor: La fumada de argumento que no tiene ni pies ni cabeza por mucha ciencia ficción que sea.
El Momento: La Pirámide de Kukulkán en México erupcionando y destruyendo casi toda centroamérica. Me parto y me mondo.